viernes, 6 de abril de 2012

Larga vida a la reina batata! (Bitácora 3/04/2012)

¡Buenos días mi estimados lectores!, espero se encuentren muy bien, además de estar deseosos de leer esta nueva bitácora sobre mi cuarta clase de música en la universidad. Encontré que fue un tanto corta esta clase, pero de todas maneras la pasé demasiado bien y deseo que se entretengan con esta entrada de mi blog:
La clase comenzó con la tarea que teníamos pendiente la semana pasada que era componer por medio del cuerpo y de la voz, una interpretación de estas oraciones:

La Cruza es aguda
Y ayuda a acentuar
Palabras acentuadas
Justo al empezar

Crusa Viento Porque
Blusa Siento Bosque
Musa Miento Choque
Rusa Tiento Toque

No se si es que dios esta jugando a los dados conmigo, pero cada vez que la profesora saca a un grupo a presentar, es mi grupo el primero, es algo bastante gracioso en el momento, pues dicen mi nombre justo cuando estoy muy cómodo en mi asiento. Pero al fin y al cabo sé que todo esto es muy útil en mi formación como profesor, ya que me estoy convirtiendo en una persona menos vergonzosa, y más aún, estoy comenzando a tomar con naturalidad el hecho de estar parado en una sala de clase donde muchas personas me observan. Volviendo al trabajo, yo con mi grupo combinamos la melodía de "Barney" con las oraciones, mientras hacíamos un juego de manos en el suelo. Al parecer a la profesora y a nuestros compañeros les gustó nuestra interpretación musical, lo que nos dejo satisfechos. Luego de nosotros, nuestros compañeros presentaron sus interpretaciones del texto que nos mandó la profesora; todas estuvieron fantásticas, algunas muy graciosas y otras mas reflexivas, pero todas igual de maravillosas.
Al regreso de la hora de almuerzo, la profesora nos dio la tarea de preguntarnos en grupos si es que estábamos de acuerdo con lo planteado en el texto "Registro en música: un modo diferente de evaluación". Este texto habla sobre la experiencia de la profesora Rosemary Eichenlaub en un sala de clase, en donde ella les dice a sus alumnos que deben hacer bitácoras sobre lo que ellos aprendieron en clase y sobre sus experiencias durante las clases. Personalmente, creo que la idea de preocuparse del aprendizaje de cada alumno de una sala de clases es algo excepcional, es decir, es el sueño de todo buen educador el poder identificar las fortalezas y debilidades de cada alumno, pues así se puede mejorar el aprendizaje de cada estudiante ya sea en forma particular o en forma colectiva.
Luego, como es de costumbre, llegó la hora de ponernos de pie en la sala y cantar al compás de la profesora un vals bastante bonito llamado"La Reina Batata". Mientras la cantábamos tuvimos que bailar un poco con el ritmo del vals, fue algo muy bonito y gracioso ya que como yo no se bailar muy bien pero, al ver que mis compañeros también se enredaban me hizo pasar un buen rato.
http://www.youtube.com/watch?v=unEYXoRpgnM

Bueno mis estimados lectores, esta fue mi cuarta bitácora. Espero que hayan podido sentir aunque sea una poquita de la alegría que intento transmitir en esta entrada, pues me divertí mucho con todo lo que hicimos en la sala de clases, en especial con la historia de la pobre reina batata. Los espero volver a ver la próxima semana en mi blog, donde les contaré una nueva experiencia en mi clase de música, muchos saludos y abrazos psicológicos!

lunes, 2 de abril de 2012

Música, música...la palabra es crúsica! (Bitácora 27/03/12)

¡Hola mis estimados lectores! espero que en este momento se encuentren muy bien y dispuestos para leer esta nueva entrada que trata sobre mi tercera clase de música. Déjenme decirles que en estos momentos estoy acompañado por Clarissa, mi guitarra regalona, quién me esta ayudando a componer un ritmo para una tarea que tengo para la siguiente clase. Me encantaría darles un adelanto de lo que componemos Clarissa y yo pero es una sorpresa, y ella es la que manda en nuestra relación. Sin más preámbulos comenzaré con mi bitácora:
Comenzamos la clase recordando lo que ya habíamos aprendido en las sesiones anteriores, es decir, hablamos nuevamente acerca de los parámetros del sonido (Timbre, Altura, Duración e Intensidad). Luego de esto, la profesora nos enseño algunos elementos de las cuales se componen una partitura (éste es el nuevo tema que estamos tratando) como por ejemplo las corchas, las blancas, las negras y los silencios, es decir, las figuras musicales. Me agradó aprender aunque sea algo muy básico de la interpretación de una partitura, pues creo que en mi formación como compositor debo adentrarme mas en todo lo que le concierne a la música, y eso incluye a la habilidad de leerla en una partitura.
Luego de saber el significado de estas figuras musicales pusimos lo aprendido en práctica: La profesora empezó a dictar oraciones cortas, y nosotros tuvimos que descifrar las distintas figuras que componían dichas oraciones.
Después de el dictado donde ejercitamos las figuras musicales, la profesora anotó en el pizarra otra serie de oraciones, pero ahora con el fin de que las repitiéramos y descubriéramos como es que las tildes en las palabras pueden cambiar totalmente el sentido de una oración. Creo que esta parte de la clase fue la mas importante hasta ahora en el ramo, pues sé que la expresividad y la fuerza que uno le da a cada palabra, frase u oración, puede hacer cambiar la actitud de un alumno distraído a un alumno que pone atención. Todos alguna vez hemos querido decir algo que pensamos, y que al momento de decirlo, pronunciamos mal las palabras lo que genera que las personas no nos entiendan; como profesor eso no debe ocurrirme por lo que debo practicar esa parte.
Luego de este ejercicio definimos lo que son las palabras anacrúsicas y las palabras crúsicas. Las Palabras anacrúsicas son aquellas que se acentúan después de la primera silaba (camello, pelota, guitarra, etc.), en cambio las crúsicas son aquellas que comienzan acentuadas, es decir, llevan la tilde en la primera sílaba (Claudia, marco, música, etc.).
Al terminar con las definiciones de estas palabras, nos pusimos de pie en la sala y comenzamos a repetir mientras caminábamos todas las palabras que repetía la profesora, remarcando las tildes en las palabras y dándoles ritmos alrededor del aula. También, con el mismo objetivo de acentuar las palabras, cantamos el poema "La brujita" de Marcela Paz, donde todos nos reímos y nos entretuvimos con aquellas dulces oraciones.
Luego de estas clases, me entusiasma el saber que podría ocupar estas mezclas de sonidos para entusiasmar a mis futuros alumnos en las salas de clase. Por ejemplo, ya estoy intentando componer junto con mi querida Clarissa una composición musical que facilite el aprendizaje de las tablas de multiplicar.
Bueno mis queridos lectores, espero les haya gustado esta bitácora sobre mi tercer encuentro con la enseñanza de la música, los espero ver durante la próxima semana para mostrarles lo que pasará en la sala de clases ¡Cuídense y nos vemos pronto!